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  • Yecla de Yeltes Fortified Settlement
    Yecla de Yeltes Fortified Settlement

Circuito de Yecla de Yeltes: El castro de Yecla la Vieja

Este segundo circuito comienza en el pueblo de Yecla de Yeltes. Las características de este castro y los restos arqueológicos hallados lo convierten en el más importante de los poblados de la penillanura salmantina.

El castro de Yecla la Vieja, también conocido como “El Castillo”, se localiza a un par de kilómetros al sur del pueblo de Yecla y constituye una de las fortificaciones prerromanas más espectaculares de la Península Ibérica. Es un poblado de larga ocupación, quizá llamado originalmente Virlanga. Fue levantado en torno al siglo V antes de Cristo por los vetones, y estuvo ocupado por ellos y sus descendientes hispanorromanos durante casi mil años. Se cree que los conflictos provocaron durante la repoblación de Ledesma en el siglo XII el abandono del asentamiento por la nueva aldea de Yecla, aunque en época de los Reyes Católicos se levantó una ermita dentro del recinto, la de Nuestra Señora del Castillo.

El recorrido por este circuito comienza en la ermita de Santiago Apóstol, construida sobre una necrópolis tardorromana. En las recientes excavaciones se descubrieron estelas romanas reutilizadas en los muros y también varias tumbas construidas con lajas de piedra, con ajuares funerarios que remiten al siglo V o VI de nuestra era.

La siguiente parada es la impresionante muralla de Yecla que llegó a alcanzar los 5 metros de altura y, en algún punto, los 14 metros de anchura. La defensa del poblado estaba en juego pero también el prestigio de sus jefes.

La necrópolis romana donde se exponen varias tumbas construidas con lajas de granito; la puerta romana con sus grabados de animales (entre ellos el de una yegua acompañada de su cría) y el viejo poblado son otros de los elementos de interés del recorrido. Este poblado, primero vetón y luego  romano, fue ocupado después por los hombres de la Edad Media quienes levantaron casas adosadas a la muralla y largos muros para encerrar el ganado.

La puerta sur del Castro, cegada durante siglos, se abre ahora al viajero. En ella se puede descubrir uno de los conjuntos de grabados más importante del Castro, donde el caballo es el máximo protagonista. La muralla posee cientos de éstos misteriosos motivos. Aquí comienza una divertida búsqueda.

El paseo permite descubrir también la pensada localización del Castro en la confluencia de dos ríos (el Huebra y el arroyo Varlaña).

Diferentes grabados, el molino del Varlaña, el campo de piedras hincadas construido por los vetones para protegerse de los ataques de la caballería y la ermita de Nuestra Señora del Castillo son otros puntos de interés en la visita.

En el pueblo se encuentra el Museo del Castro de Yecla La Vieja destinado a preparar este viaje por el tiempo. La cultura material y espiritual de los vetones es analizada en el aula, con variados recursos audiovisuales y expositivos, incluyendo piezas arqueológicas originales como cerámicas, armas, objetos decorativos y una escultura zoomorfa tan propia de esta cultura, el “verraco”. También se exhiben cabezas humanas esculpidas en piedra y vestigios de la posterior ocupación romana, con una importante colección de estelas funerarias. 

Castro de Yecla la Vieja

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